Los enfermeros y enfermeras representan un enorme valor para los habitantes del mundo rural. En una España interior cada vez más vaciada, el trabajo de los profesionales de Enfermería resulta vital para una población envejecida y, además, con un sentimiento generalizado de abandono. Prueba de ese valor son los recientes homenajes que han recibido algunos de los integrantes de este colectivo sanitario en sendas localidades de Castilla y León.
HOMENAJE EN VELAYOS (ÁVILA)
El primero de ellos ha sido el reconocimiento al trabajo desarrollado durante muchos años por Francisco Vicente Soler, a quien el Ayuntamiento de la localidad abulense de Velayos, cuyo Ayuntamiento aprobó en pleno en el mes de mayo pasado que el consultorio médico de ese municipio llevara a partir de ahora el nombre de este enfermero, “quien durante tantos años ha ejercicio su profesión con esmerada dedicación y entrega” han señalado desde la casa consistorial. Francisco Vicente Soler ha visto así cómo se premiaba con este nombramiento el esfuerzo y el trabajo desarrollado durante muchos años en esta localidad de la provincia de Ávila.


SENTIDA DESPEDIDA EN BARRUELO DE SANTULLÁN (PALENCIA)
Si emotivo fue el primero de los homenajes, no lo fue menos el que ha recibido en este mes de julio la enfermera más veterana del centro de salud del municipio palentino de Barruelo de Santullán, Inés Otero Boto, quien comienza la que deseamos sea una muy feliz etapa de jubilación tras el gran trabajo realizado en esta localidad. Prueba de ese cariño bien ganado ha sido el hecho de que su jubilación se haya convertido en un asunto de interés para toda la comarca de la Montaña Palentina.
Decenas de vecinos se reunieron el 4 de julio pasado a las puertas del centro de salud de Barruelo para ofrecer su testimonio y homenaje a Inés Otero, quien aseguró emocionada ante estos vecinos que “pese a todo lo que me dijeron, jamás me he arrepentido de venir aquí” y es que el centro de salud de Barruelo es uno de los más amenazados por esa despoblación que aleja cada vez más a todos los servicios de quienes residen en el medio rural, en este caso en uno de los antiguos municipios mineros del norte palentino. Al homenaje asistieron no solo residente en la zona, también estuvo presente el alcalde de Barruelo, Cristián Delgado quien glosó el trabajo de Otero en “toda una vida de cuidados a los demás y que ahora le toca descansar también a ella”. No olvidó el alcalde precisar que la Corporación se mantendrá atenta para que la plaza que deja vacante Inés se cubra. “Nos mantendremos vigilantes” precisó Delgado. La concejala de Servicios Sociales, María Ángeles Polanco del Barrio, hizo entrega de un regalo a la enfermera en nombre del municipio.